El Príncipe Harry asistirá a los premios WellChild en el Reino Unido a finales de septiembre

El duque de Sussex ha sido patrocinador de la organización benéfica durante 16 años, y la buena causa realiza el evento cada año para celebrar a los niños y jóvenes que viven con enfermedades graves y requisitos médicos complicados.

Al parecer, el Príncipe Harry asistirá a los premios WellChild en el Reino Unido a finales de septiembre.

El duque de Sussex, de 40 años, que tiene a sus hijos Archie, de cinco años, y Lilibet, de tres, con su esposa Meghan, duquesa de Sussex, de 43, ha sido patrocinador de la organización benéfica durante 16 años, y la buena causa realiza el evento cada año para celebrar a los niños y jóvenes que viven con enfermedades graves y requisitos médicos complicados.

Se cree que Harry no será acompañado por Meghan en su viaje de regreso a Gran Bretaña, según ha informado The Times.

El periódico añade que no está claro si Harry verá a su padre, el rey Carlos, de 75 años, durante su visita, ya que el monarca se encontrará en Escocia cuando él llegue.

Según el diario, “no hay planes para que se reúnan” e informó que Carlos, que sigue luchando contra un tipo de cáncer no revelado, “permanecerá en Escocia hasta octubre”.

Harry, que cumplió 40 años el domingo (15.09.24), asistirá al evento WellChild el 30 de septiembre, y tiene previsto pasar tiempo con los ganadores y sus familias en una recepción antes de la ceremonia.

Se espera qu pronuncie un discurso y entregue el premio a un niño inspirador de entre cuatro y seis años.

Harry dijo acerca de su próxima visita: “Una vez más me siento honrado de asistir a los premios WellChild de este año, que celebran el extraordinario valor y los logros de los niños con necesidades médicas complejas. Estos jóvenes increíbles, junto con los dedicados cuidadores, enfermeros y profesionales que los apoyan incansablemente, nos inspiran a todos. Es un verdadero privilegio reconocer a personas tan extraordinarias”.

Según The Times, Harry no se reunió con Carlos durante su última visita al Reino Unido y, aunque se le ofreció alojamiento en el Palacio de Buckingham, prefirió alojarse en un hotel.

Se encontraba en Londres para asistir a un servicio religioso en la catedral de San Pablo con motivo del décimo aniversario de los Juegos Invictus.