El ex clavadista olímpico, de 30 años, ha revelado que luchó con problemas de imagen corporal en el apogeo de su carrera deportiva cuando era sólo un adolescente y se manifestó en ‘dismorfia corporal y bulimia’.
Tom Daley “se sentía muy solo” cuando luchaba contra un trastorno alimenticio.
El ex clavadista olímpico, de 30 años, ha revelado que luchó con problemas de imagen corporal en el apogeo de su carrera deportiva cuando era sólo un adolescente y se manifestó en “dismorfia corporal y bulimia”.
Así lo contó a la revista Fashion: “Tuve momentos de verdadera lucha. No le di importancia cuando era más joven, pero en 2011, mi director de rendimiento me dijo que tenía sobrepeso y que necesitaba verme como cuando tenía 14 años -tenía casi 18 en ese momento-. Esa fue la primera vez que sentí que alguien miraba mi cuerpo, no desde el punto de vista de la actuación, sino por su aspecto. Así que, sí, en esa época luché contra todo tipo de problemas relacionados con la dismorfia corporal y la bulimia”.
A la pregunta de si las redes sociales han aumentado la presión sobre los deportistas para que tengan un aspecto determinado, Tom respondió: “Ha aumentado en ciertos aspectos, pero hay mucho más apoyo. Además, hay mucha más información sobre cómo alimentar el cuerpo correctamente. Cuando yo tenía problemas, los hombres no hablaban de ello.
Era como: ‘Bueno, eso solo les pasa a las chicas’. Así que me sentí muy solo en esa experiencia”.
Tom tenía sólo 14 años cuando se convirtió en el centro de atención como parte del equipo olímpico de Gran Bretaña en 2008 y la estrella del deporte -que tiene dos hijos con su marido Dustin Lance Black- admitió anteriormente que se siente “afortunado” de que sus logros hayan sido bien documentados, sobre todo porque fue su hijo mayor quien le inspiró a participar en los Juegos Olímpicos de París 2024, donde ganó una medalla de plata.
En declaraciones al programa de televisión británico ‘This Morning’, explicó: “Me siento muy extraño de que toda mi vida esté documentada de esa manera, pero al mismo tiempo me siento afortunado de que mis hijos puedan mirar atrás y ver todas las cosas que hice y todas las cosas que ellos me inspiraron a hacer. Si no hubiera sido por Robbie mi hijo, no habría vuelto a estos Juegos Olímpicos, y estoy muy contento de haberlo hecho y de haber ganado otra medalla. También es muy especial cuando me encuentro con gente por la calle y me hacen preguntas sobre mis clavados. Juro que la gente sabe más de mi vida que yo mismo y ¡dónde voy a estar! Pero ha sido genial volver y formar parte de nuevo del Equipo GB”.
Tom Daley ‘se sentía muy solo’ cuando luchaba contra un trastorno alimenticio
