Camila Cabello se niega a tomar el transporte público

La estrella del pop de 28 años -que saltó a la fama de adolescente cuando formaba parte del grupo Fifth Harmony- sólo se ha subido a unos pocos trenes en su vida, pero no viaja en metro y prefiere hacerlo en un lujoso Uber.

Camila Cabello se niega a tomar el transporte público.

La estrella del pop de 28 años -que saltó a la fama de adolescente cuando formaba parte del grupo Fifth Harmony- sólo se ha subido a unos pocos trenes en su vida, pero no viaja en metro y prefiere hacerlo en un lujoso Uber.

En declaraciones a ‘Smallzy’s Surgery’, dijo: “He tomado algunos trenes. El metro no. No voy a mentir, voy en los todoterrenos negros de Uber. De verdad”.

La intérprete de ‘Havana’ añadió que, a pesar de que detesta el transporte público, le “encanta” lavar los platos, aunque tiene que hacerlo a mano porque no tiene ni idea de cómo utilizar un aparato lavavajillas.

Y añadió: “Estoy sonando como una tonta con lo de no usar el transporte público, pero me encanta fregar los platos. En realidad, no voy a decir que me encanta fregar los platos. Estaría mintiendo. Realmente necesito aprender a usar un lavavajillas. No sé usar un lavavajillas. Pero lavo mis propios platos”.

Camila también admitió, al ser preguntada por sus hábitos de lavandería, que no lava su propia ropa, pero que sabe hacer algunas tareas en la cocina, aunque tenga que buscar “cómo cortar” ciertos alimentos.

Y añadió: “Tengo que decir que no. Lo sabía. No lavo la ropa. ¿Qué más hay que hacer? Sé hacer la comida. Aunque para la mayoría de las verduras busco cómo cortarlas”.

La cantante de ‘Don’t Go Yet’ ya había admitido que tuvo que desarrollar un “exterior más duro”, al igual que sus compañeras estrellas del pop, para hacer frente a las presiones de la fama.

Lo dijo a la revista NYLON: “Estar en la industria me hizo desarrollar una coraza y un exterior más duros. Al igual que Rihanna, Beyoncé, Taylor Swift, este tipo de bravuconadas aparecen en sus últimos trabajos. Es la construcción de una coraza. Mis álbumes anteriores eran más limpios, como: ‘Estoy tan enamorada y feliz, bla, bla, bla’. Eran álbumes diurnos. Me gusta la idea de que ‘C,XOXO’ sea nocturno. Más fricción, más complicado: ‘Esto está mal, pero en cierto modo me gusta'”.