Kevin Bacon no deja que la fama le afecte

El actor, de 66 años, bromeó diciendo que ‘todavía está esperando’ para triunfar y que no le importa lo complicado que se ponga todo cuando hace una película, sólo tiene ‘ganas’ de dejar atrás el glamour de todo eso y seguir con su trabajo.

Kevin Bacon no deja que la fama le afecte.

El actor, de 66 años, ha sido uno de los pilares de Hollywood durante décadas, pero bromeó diciendo que “todavía está esperando” para triunfar y que no le importa lo complicado que se ponga todo cuando hace una película, sólo tiene “ganas” de dejar atrás el glamour de todo eso y seguir con su trabajo.

Cuando se le pidió que recordara el primer momento en que supo que “ya era exitoso”, declaró a The Times: “¡Todavía estoy esperando! Es decir, creo que siempre hay momentos en los que te dices a ti mismo, joder, mi nombre está por encima del título, o tengo una valla publicitaria en Sunset Boulevard, o estoy sentado aquí con Johnny Carson. A mí se me pasa bastante rápido y luego tengo ganas de volver al trabajo”.

La estrella de ‘Patriots Day’ debutó en la televisión a finales de los años 70, cuando apareció brevemente en la telenovela estadounidense ‘Search for Tomorrow’, antes de pasar al éxito en el cine convencional, y explicó que ansiaba llamar la atención cuando tenía pocos años, antes incluso de saber lo que era un actor.

Dijo: “Antes de saber lo que era un actor, probablemente a los tres o cuatro años. Recuerdo la sensación de que si entraba en la habitación de nuestra pequeña casa de Filadelfia, si había gente allí, quería que me miraran. Quería que reaccionaran ante mí: era una forma de querer ser artista. Actuar fue una habilidad a la que me dediqué basándome en ese deseo de que me vieran y de actuar para la gente”.

Sin embargo, cuando se le pidió que recordara un director con el que realmente “congeniara”, Kevin admitió que no fue hasta pasados unos años de su carrera cuando tuvo una verdadera “gran experiencia” y aprendió habilidades que ha conservado hasta el día de hoy.

Dijo: “Barry Levinson. Hicimos una película llamada ‘Diner’. Yo había hecho ‘Viernes 13’ y ‘Animal House’ y algunos papeles más pequeños. Cuando Barry me eligió, no fue tanto porque me diera consejos, sino porque me enseñó algunas herramientas de interpretación que llevo conmigo desde hace mucho tiempo. Y además me encantó, porque era divertidísimo. Fue una gran experiencia”.