La actriz interpreta a una mujer decidida a tener su primer orgasmo después de que le diagnosticaran un cáncer terminal tras su divorcio.
A Michelle Williams le parece bien que sus hijos vean ‘Dying for Sex’ cuando estén preparados.
La actriz de 44 años -que tiene a Matilda, de 19 años, con el fallecido actor Heath Ledger, así como a Hart, de cuatro, un hijo de dos años, y un bebé de ocho semanas con su marido Thomas Kail- interpreta a una mujer decidida a tener su primer orgasmo después de que le diagnosticaran un cáncer terminal tras su divorcio y, aunque siempre ha tenido en cuenta que su familia vea sus proyectos, no se censurará a sí misma ni sus decisiones, ya que espera que su trabajo haga que sus hijos la entiendan mejor.
Durante una rueda de prensa de críticos virtuales, le preguntaron a Michelle si tenía alguna reserva y cómo se sentía “representando todas estas variaciones tan diferentes y tan impresionantes de orgasmos”.
Según la revista PEOPLE, respondió: “En algún lugar, tal vez como en el fondo de mi cabeza, oigo a alguien que me dice: ‘no hagas algo que tu abuela no podría ver’, pero también en el frente de mi mente, lo que oigo es algo así como: ‘haz cosas que te gustaría que tus hijos vieran, apropiadas para su edad’, pero quiero dejar constancia de quién era yo. Y si a mis hijos les interesa, pueden tomarlo y saber lo que hacía cuando no estaba con ellos. Siempre he querido hacer algo de lo que me sienta orgullosa y que incluso mis hijos, cuando crezcan, puedan sentir una comprensión más profunda de quién era y qué me interesaba. Y, por eso, estoy detrás de esto, y me metí de lleno en la experiencia”.
Anteriormente, Michelle elogió al “maravilloso” coordinador de intimidad que trabajó en el programa.
Así lo señaló a la misma publicación: “Tuvimos una coordinadora de intimidad maravillosa, Claire, que nos enseñó mucho.No sólo se aseguró de que todos los actores se sintieran seguros y de que se respetaran sus límites, sino también de que se les permitiera mantener conversaciones privadas. Creo que eso es lo más importante de un coordinador de intimidad, que te permita tener una conversación privada antes de tiempo. Sabes que tu compañero de escena se siente seguro, se siente comprendido, y sea cual sea el trauma o el pasado que traiga inherente como ser humano que ha recorrido un largo camino para llegar hasta aquí. Van a estar seguros y eso va a estar protegido y cuidado, y no tienen que explicárselo a un millón de personas o pedir permiso”.
A Michelle Williams le parece bien que sus hijos vean ‘Dying for Sex’ cuando estén preparados
