Alan Cumming siempre intentaba ‘probarse algo’ a sí mismo después de soportar una relación extraordinaria con su padre

El actor de 60 años afirmó que su padre fue un ‘matón’ con él durante toda su infancia y que todavía está intentando ‘superar’ los problemas que eso le acarreó, pero insistió en que su ‘impulso’ para triunfar vino de esa parte ‘aterradora’ de su juventud.

Alan Cumming siempre intentaba “probarse algo” a sí mismo después de soportar una relación extraordinaria con su padre.

El actor de 60 años afirmó que su padre fue un “matón” con él durante toda su infancia y que todavía está intentando “superar” los problemas que eso le acarreó, pero insistió en que su “impulso” para triunfar vino de esa parte “aterradora” de su juventud.

Durante una emisión del podcast ‘Turning Points’, le dijo a Lulu, la creadora de ‘Shout’: “Cuando tienes miedo de cosas en tu infancia… y uno de tus padres es tu matón, eso proyecta una sombra muy larga en tu vida y todavía estoy trabajando en ello. Pero la otra cosa es que, ya sabes, mi ‘laboriosidad’ y mi empuje en ese sentido, no quiero atribuirlo a que mi padre no me quisiera. Creo que estoy intentando demostrar algo, pero en realidad me estoy demostrando algo a mí mismo”.

El presentador de ‘Traitors USA’ afirmó que su padre le llamaba “inútil” y disfrutaba “haciéndole daño”, pero al final ese tipo de comportamiento le dio el valor que necesitaba para rebelarse y centrarse en su carrera.

Dijo: “Cuando alguien te dice que no vales nada y disfruta haciéndote daño, alguien que se supone que te quiere y cuida de ti, definitivamente te hace ser muy consciente de ti mismo y tener que tomar tus propias decisiones… vigilarte y tomar decisiones sobre todo, incluso sobre ti mismo. Pero también te hace pensar: ‘Jódete, voy a hacer lo que me dé la gana, voy a vivir mi vida’”.

La estrella de ‘Spice World’ habló más sobre los abusos que sufrió a manos de su padre en ‘Not My Father’s Son’ y reflexionó que, aunque lo hizo sólo por sí mismo, fue una “gran sorpresa” que el proyecto ayudara también a otras personas.

Dijo: “Cuando escribí el libro sobre mi padre, que surgió por una serie de circunstancias en las que de repente volvió a mi vida, contar esa parte final de mi historia, de la que nunca había hablado públicamente, fue inesperadamente brillante… porque muchas otras personas que habían pasado por cosas similares o habían tenido una variedad de cosas diferentes en sus vidas me dijeron: ‘porque has hablado de lo que era tu demonio, ahora me siento con fuerzas para hablar del mío’. Y así te das cuenta de que ayudas a tanta gente siendo auténtico y honesto. Y piensas que lo haces por ti, y que tienes que hacerlo por ti, pero en realidad fue una gran sorpresa para mí.