La actriz de Tus amigos y vecinos -que tiene a Malcolm, de tres años, y a Mei, de ocho meses, con su marido John Mulaney- no piensa que los programas de animación sean particularmente ‘interesantes’.
Olivia Munn no deja que sus hijos vean dibujos animados.
La actriz de Tus amigos y vecinos -que tiene a Malcolm, de tres años, y a Mei, de ocho meses, con su marido John Mulaney- no piensa que los programas de animación sean particularmente “interesantes” y tampoco es fan de la favorita de los niños en YouTube, la Sra. Rachel.
Así lo dijo a la revista PEOPLE: “Sé que a los niños les encanta [ la Sra. Rachel], pero la cosa es que si yo no puedo verla, no voy a pasarme el resto de mi vida volviéndome loca. Estos programas para niños me vuelven loca. Malcolm me pidió Blue’s Clues hace poco, y no sé quién le enseñó Blue’s Clues, pero ahora están en mi lista de cosas para no ver. Le dije: ‘Claro que no. En mi casa no’. John le metió los dibujos animados de Spiderman, que no me interesan. Le puse Spider-Man: Homecoming de Tom Holland y le dije: ‘Si quieres ver los de la vida real, entonces podemos ver eso’. Puede que sea un poco mayor para él, pero yo no puedo con los dibujos animados”.
Sin embargo, Olivia, de 44 años, hizo una excepción con Daniel Tiger’s Neighborhood, que le parece “genial”, y a ella y a John, de 42, les ayudó que Malcolm viera los dibujos animados de PBS antes del nacimiento de Mei para que pudiera prepararse para ser hermano mayor.
Señaló al respecto: “Daniel Tiger tiene una hermana pequeña y le decíamos: ‘Viene una hermanita'”.
Tras el nacimiento de Mei, la pareja tuvo cuidado de no “cambiar el mundo, la identidad y las responsabilidades de Malcolm”.
Olivia explicó: “Muchas veces la gente dice: ‘Oh, ahora eres hermano mayor. Ya no eres el bebé. Ahora puedes ayudar a mamá a comprar los pañales’. Así que, de repente, tiene todas esas responsabilidades y ya no puede despreocuparse. En vez de eso, le decíamos: ‘Ahora tenemos dos bebés. Méi Méi y Malcolm’. Decía: ‘Mamá, ven aquí. Papá, ven aquí’, y si teníamos a la bebé en brazos, lo dejábamos en el suelo para que no sintiera que de repente ya no podíamos estar a su lado. No es que intentáramos enseñarle que todo lo que dice vale, pero queríamos que tuviera la transición con ella para que supiera que seguimos aquí siempre que nos necesita. Luego, con el tiempo, cuando decía: ‘Deja a Méi Méi’, le decíamos: ‘No, ella también quiere ver a su mamá’. Sonríe y lo entiende”.
Aunque sólo tiene ocho meses, Méi ya demuestra que “quiere a su hermano”.
Así lo dijo: “Vaya donde vaya, ella se ilumina. Le está enseñando a hablar. Tenemos un video genial en el que le dice que diga ‘papá’ y ella le contesta ‘papá’. Es asombroso y divertido para él, porque recibe una respuesta y una gratificación instantáneas cuando ella hace lo que él le está enseñando a hacer. Le pregunté si podía enseñarle a mamá, pero me dijo que no”.
Olivia Munn no deja que sus hijos vean dibujos animados







