Keke Palmer quiere que su hijo sepa que ‘la felicidad está en sus manos’

La actriz de 31 años, que tiene a Leo, de dos años, con su expareja Darius Jackson, quiere que su bebé sepa que ‘siempre puede convertirse en una persona nueva’.

Keke Palmer quiere que su hijo sepa que “la felicidad está en sus manos”.

La actriz de 31 años, que tiene a Leo, de dos años, con su expareja Darius Jackson, quiere que su bebé sepa que “siempre puede convertirse en una persona nueva”.

Cuando se le preguntó qué espera que Leo aprenda de ella, Keke le dijo a Extra: “Simplemente nunca tener miedo de evolucionar. Creo que nos enfrascamos demasiado en nuestras historias, e incluso cuando son difíciles, nos cuesta salir de ellas, pero siempre puedes transformarte. Siempre puedes convertirte en alguien nuevo y dejar que tu felicidad, tu alegría y tu paz sean tu fuerza guía. Quiero que sepa que la felicidad es suya, pero tiene que tomarla, ¿sabes?”.

Mientras tanto, Keke reveló recientemente que le resultó “muy, muy difícil” recuperar su figura anterior al embarazo.

La estrella de Hollywood dijo a la revista PEOPLE: “Tienes que volver a ser tú misma después de tener un bebé. Es muy, muy difícil. Cualquiera que tenga hijos sabe que a veces puede llevar tres, cuatro, cinco años. Realmente te deja exhausto”.

Keke reveló que Pilates ha sido clave en su rutina de ejercicios.

La actriz compartió: “Soy una chica de Pilates, no me importa. Es Pilates. Y necesito que la gente sepa que no importa lo que marque la báscula. Lo importante son los músculos. Eso es lo que me encanta de Pilates. No importa tu talla, con Pilates tu cuerpo se va a arrebatar”.

Keke combinó su rutina de ejercicios con una dieta sana y equilibrada.

Dijo: “Si pudieras encontrar una clase de baile, pilates, yoga, ciclismo, cualquier clase que te guste, que puedas tomar al principio del día antes de ir a trabajar, te irá de maravilla. La constancia te hará maravillas. Y luego te digo: prepara tu propia comida. Ya sé, ya sé que es mucho. Nadie quiere preparar la comida, pero preparar tu propia comida y saber qué le pones, hace maravillas. Preparar tus propias comidas, mantenerlas constantes con algún tipo de actividad. Realmente transforma tu cuerpo. Y luego, cosas divertidas. A veces olvidamos que no todo tiene que ser un entrenamiento serio. ¿Y si voy a jugar al tenis o al pickleball con mi chico? ¿Y si simplemente vamos a nadar un día? ¿Sabes a qué me refiero?”.