El actor de 52 años interpreta al líder ruso en El mago del Kremlin y no dudó en aceptar colaborar en el thriller político porque tuvo plena confianza en el trabajo del director Olivier Assayas.
Jude Law no “temía repercusiones” por interpretar a Vladimir Putin.
El actor de 52 años interpreta al líder ruso en El mago del Kremlin y no dudó en aceptar colaborar en el thriller político porque tuvo plena confianza en el trabajo del director Olivier Assayas.
En una conferencia de prensa de la cinta en el Festival de Cine de Venecia, dijo: “Espero no ser ingenuo, pero no temía las repercusiones. Tenía confianza, en manos de Olivier y del guion, de que esta historia se contaría con inteligencia, matices y consideración. No buscábamos la controversia por la controversia misma. Es un personaje de una historia más amplia. No intentábamos definir nada sobre nadie”.
Jude cambió su apariencia física pero usó su propia voz en la película, en lugar de adoptar un acento ruso porque él y el director no querían mostrar una “interpretación de Putin”.
Al respecto, indicó: “Olivier y yo hablamos de que esto no debía ser una interpretación de Putin, y él no quería que me escondiera tras una máscara de prótesis. Trabajamos con un equipo de maquillaje y peluquería increíble y teníamos referencias de esa época de la vida de Putin. Intentamos encontrar algo que me resultara familiar. Es increíble lo que una buena peluca puede hacer”.
El mago del Kremlin es una adaptación del libro homónimo de Giuliano da Empoli y es un relato ficticio del ascenso de Putin al poder y su amistad con Vadim Baranov, un asesor de imagen que está inspirado en el solucionador de problemas de la vida real, Vladislav Sourkov, a quien se le atribuye haber jugado un papel clave en la personalidad del líder ruso.
Paul Dano interpreta a Sourkov y estaba ansioso por observar los aspectos internos de su alter ego.
Dijo: “No creo que haya que buscar lo positivo, pero hay que estar dispuesto a descubrir el punto de vista del personaje. Si se etiquetara simplemente a un personaje como Baranov como malo, sería una simplificación excesiva que traería más problemas que beneficios. Necesitamos preguntarnos: ¿Por qué?”.
Mientras tanto, el director Olivier cree que la película es más una historia de advertencia sobre la “transformación de la política durante nuestra vida” que sobre Putin y Rusia específicamente.
Indicó: “La película trata en gran medida sobre cómo se inventó la política moderna. Parte de ese mal surgió a partir del ascenso al poder de Vladimir Putin en Rusia. Hicimos una cinta sobre la situación actual de la política y la aterradora y peligrosa situación en la que nos encontramos. Esto aplica a muchos líderes autoritarios”.
Jude Law no ‘temía repercusiones’ por interpretar a Vladimir Putin
