Jessie J compara la cirugía de cáncer con un episodio de Black Mirror

La estrella del pop de 37 años, cuyo verdadero nombre es Jessica Cornish, reveló en junio que le habían diagnosticado cáncer de mama y que posteriormente se sometió a una mastectomía y cirugía reconstructiva.

Jessie J ha comparado la cirugía de cáncer con un episodio de Black Mirror.

La estrella del pop de 37 años, cuyo verdadero nombre es Jessica Cornish, reveló en junio que le habían diagnosticado cáncer de mama y que posteriormente se sometió a una mastectomía y cirugía reconstructiva. Ahora, la cantante se ha sincerado sobre su experiencia con la anestesia general, admitiendo que odia que la “sometan” a ella porque se siente como si estuviera en un episodio de la exitosa serie de ciencia ficción de Netflix.

Jessie le dijo al periódico Guardian: “Odio que me adormezcan. Te llevan caminando. Ya sabes, cuando te operan de urgencia, te acuestas en una cama, pero esta vez bajé con una bata y el trasero al aire. Te sientes como en un episodio de Black Mirror… El cáncer es una mierda, pero ¿sabes qué? Menos mal que lo detecté a tiempo. Me hicieron una mastectomía hace cuatro meses y ahora mi pecho derecho parece una toronja bajo una sábana apretada… Ahora son de diferentes tamaños. No me hicieron un implante tan pequeño como el original. ¡Qué grosero! Pensé: no hay necesidad de intimidarme, ya la estoy pasando mal. ¡Qué grosero! Es gracioso porque dije que nunca me operaría los pechos porque tengo TOC, y sé que nunca quedarían perfectos. El cáncer arruinó ese plan”.

Jessie admitió además que cree que su vida ha estado plagada de problemas de salud que siempre parecen suceder cuando tiene éxito.

Ella explicó: “Sinceramente, siento que la vida me dice: ‘¿La estás pasando bien? Siéntate’. Desde niña, siempre ha acompañado momentos de éxito; algo grave o extraño le ha pasado a mi salud”.

Jessie trabajaba en el West End de Londres como estrella infantil cuando le diagnosticaron una enfermedad cardíaca llamada síndrome de Wolff-Parkinson-White y más tarde sufrió un derrame cerebral leve a los 17 años, poco después de conseguir un contrato discográfico como parte de un grupo de chicas.

También se dañó la laringe en un accidente automovilístico en 2020 cuando estaba a punto de lanzar nueva música y el accidente la dejó sin poder cantar durante un año.

Jessie añadió sobre sus problemas de salud: “Claramente tengo una adicción a que me diagnostiquen cosas. Así que tal vez el cáncer sea parte de eso… Mi mamá y mi papá siempre hicieron un gran trabajo para no hacer que eso fuera lo definitivo en mi vida y para no definir mi carácter por mis peores días. Eso fue increíble y se ha mantenido hasta ahora”.