Blake Lively tacha de ‘sexista’ a The Hollywood Reporter

La actriz, de 37 años, arremetió contra la publicación después de que su reciente imagen de portada la mostrara lanzando un tirachinas a Justin Baldoni calificando la imagen de ‘escandalosamente insultante’.

Blake Lively ha tachado de “sexista” a The Hollywood Reporter.

La actriz, de 37 años, arremetió contra la publicación después de que su reciente imagen de portada la mostrara lanzando un tirachinas a Justin Baldoni -a quien ha demandado por acoso sexual después de que trabajaran juntos en la película ‘It Ends With Us’- calificando la imagen de “escandalosamente insultante”.

Un portavoz de Blake dijo a The Daily Mail: “The Hollywood Reporter debería avergonzarse de sí mismo. El encuadre de esta película es escandalosamente insultante, ya que reproduce todos los tropos sexistas sobre las mujeres que se atreven a presentar una queja en el lugar de trabajo, convirtiéndolas en agresoras y sugiriendo que se merecen las represalias que se ejercen sobre ellas”.

Blake mantiene actualmente una disputa legal con Baldoni, de 40 años, su antiguo director y coprotagonista.

Ella le ha acusado de acoso sexual y mala conducta en el lugar de trabajo, mientras que Justin ha negado todas las acusaciones y ha presentado una demanda de 400 millones de dólares contra Blake, su marido Ryan Reynolds, de 48 años, y su publicista Leslie Sloane.

El artículo de The Hollywood Reporter explora cómo la fe Baha’i de Justin puede haber “contribuido inadvertidamente” a la disputa.

El medio de comunicación también se refirió a la afirmación de Blake en su denuncia ante el Departamento de Derechos Civiles de California de que Justin le dijo una vez que podía hablar con su “padre muerto” y señaló que esto era coherente con declaraciones anteriores que había hecho sobre su fe.

El informe decía: “También ha hecho referencia a su interés por el más allá en entrevistas”.

También sugirió que la batalla legal de Blake y Justin puede provenir de un “malentendido cultural”, diciendo: “¿Y si gran parte de ello -los supuestos abrazos inapropiados y los rezos previos al rodaje- pudiera explicarse como un enfrentamiento entre una comunidad muy específica impulsada por la fe, con sus costumbres únicas, y otra mucho más moderna, post#MeToo, con su propio conjunto de creencias y mandamientos?”.

El portavoz de Blake rechazó la caracterización, diciendo: “La historia es extremadamente ofensiva, ya que increíblemente parece explicar ejemplos documentados de acoso sexual y represalias llamándolos ‘malentendidos culturales'”.