Eiza González fue despedida de ‘Plaza Sésamo’ por ser una ‘completa amenaza’

La actriz, de 35 años, comenzó su carrera como actriz en México cuando sólo tenía cinco años, pero el programa infantil no tardó en ‘echarla’ por sus travesuras.

Eiza González fue despedida de ‘Plaza Sésamo’ por ser una “completa amenaza”.

La actriz, de 35 años, comenzó su carrera como actriz en México cuando sólo tenía cinco años, pero el programa infantil no tardó en “echarla” por sus travesuras.

En declaraciones a la presentadora invitada Brooke Shields en ‘The Kelly Clarkson Show’, admitió: “Estuve en ‘Plaza Sésamo’ durante un abrir y cerrar de ojos. Me echaron. Fue mi primer ‘despido’ en la vida. Básicamente era una niña hiperactiva, y también me gustaba alborotar a la gente. Era una auténtica amenaza. Tenían una maqueta de todo el set, estábamos saltando en ella y la rompimos. Y fui yo. Me despidieron de mi primer trabajo. Big Bird me despidió”.

Al raíz de lo que había hecho la estrella de ‘3 Body Problem’, su familia no estaba convencida de que fuera a triunfar como actriz.

Recuerda: “Mi madre me dijo: ‘No puedes ganarte la vida haciendo esto. Eres muy traviesa'”.

Pero Eiza estaba encantada de demostrarle a su madre que estaba equivocada.

Y añadió: “Seguro que encontré la manera de volver a esto, de alguna manera me las arreglé para entrar”.

Brooke, de 59 años, también fue actriz infantil y recordó que rompió a llorar cuando vio el maquillaje de efectos especiales que le habían aplicado para la escena de ‘Holy Terror’ en la que se quemaba en el banco de un diácono dentro de una iglesia.

Brooke -que tenía nueve años cuando hizo la película- dijo: “Eché un vistazo – en un espejo roto, que es otro horror añadido, y de repente parecía que tenía una pizza pegada a la cara. Era para la toma de la morgue, era sólo para una fotografía, y empecé a llorar”.

Eiza admitió anteriormente que cree que “se ve mejor” ahora que cuando tenía veinte años, lo que en parte atribuyó a tener más confianza y aceptarse a sí misma.

Así lo dijo a la revista InStyle: “Sorprendentemente, ahora me gusto mucho más físicamente que cuando tenía veinte años. Y una parte de ello, obviamente, es madurar y aceptarte a ti misma y hacer todo el trabajo duro, pero también creo que me veo mejor. Creo que estoy envejeciendo con mi aspecto de una forma que personalmente me gusta”.