Keke Palmer comparte ‘más de lo que suele hacer’ en su nuevo álbum

La estrella de 31 años ha trabajado en la industria del entretenimiento desde una edad temprana, pero es más sincera que nunca en su nuevo disco, Just Keke.

Keke Palmer comparte “más de lo que suele hacer” en su nuevo álbum.

La estrella de 31 años ha trabajado en la industria del entretenimiento desde una edad temprana, pero es más sincera que nunca en su nuevo disco, Just Keke.

En declaraciones a Extra, Keke dijo: “Crecer siendo una artista infantil con Disney y Nickelodeon, creo que para mí fue realmente sobre el establecimiento de las bases de lo que significa ser un producto y un artista y una marca y el uso de eso como un vehículo para hacer frente a la relación parasocial, y luego una especie de fallo que es el álbum donde comparto un poco más de lo que normalmente lo haría… a causa de todo lo que ha sucedido en mi vida hasta ahora”.

Keke explora su ruptura con el instructor de fitness Darius Jackson en el nuevo álbum.

Así lo explicó: “La música es un vehículo y una forma de arte que te permite expresarte de esas maneras tan profundas”.

Para Keke, grabar el álbum fue una experiencia muy emotiva.

La cantante, que se separó de Darius en 2023 en circunstancias muy agrias, explicó: “Revivirlo no fue difícil, pero abordar las emociones fue como estar en una carnicería… Creo que dejé todas las emociones en un rincón y las dejé reposar y yo pensaba que las había superado… pero cuando entré en el estudio y realmente tuve que mirar el montón de basura en la esquina, me di cuenta de cuánto dolor me causó y lo pesado que era”.

Por su parte, la cantante admitió anteriormente que le costó lidiar con el estrellato de su infancia.

La estrella de cine -que debutó como actriz en Barbershop 2: Back in Business en 2004- admitió que no sabía cómo lidiar con las presiones de la fama y el éxito durante sus años de juventud.

Así lo dijo en su podcast Baby, This Is Keke Palmer: “Nadie podía identificarse conmigo, ni mis hermanos, ni siquiera mis padres. Cada vez que una dinámica cambia de esa manera puede volverse muy tóxica, porque nadie sabe cómo lidiar con el trauma de ser una celebridad, o de tener un hijo celebridad”.