Enrique Iglesias y Anna Kournikova han dado la bienvenida a su cuarto hijo juntos

El cantante de 50 años y la ex tenista rusa de 44 años compartieron una publicación conjunta en Instagram revelando que han ampliado su familia, que ya incluye a los gemelos Lucy y Nicholas, de ocho años, y su hija Mary, de cinco.

Enrique Iglesias y Anna Kournikova han dado la bienvenida a su cuarto hijo juntos.

El cantante de 50 años y la ex tenista rusa de 44 años compartieron una publicación conjunta en Instagram revelando que han ampliado su familia, que ya incluye a los gemelos Lucy y Nicholas, de ocho años, y su hija Mary, de cinco.

El anuncio de la pareja incluyó una dulce fotografía del recién nacido, a quien dieron la bienvenida al mundo la semana pasada, envuelto en una manta, con un gorro de hospital y acurrucado junto a un perezoso de peluche.

Enrique y Anna subtitularon su publicación: “Mi sol 17/12/2025”.

La pareja protege su vida privada y no ha revelado ninguna información sobre el sexo o el nombre del bebé.

Fuentes cercanas revelaron a principios de este año que Enrique y Anna, que están juntos desde 2001, iban a dar la bienvenida a su cuarto hijo.

Un informante dijo a la revista PEOPLE: “Anna y Enrique están muy felices de convertirse en padres nuevamente. Han demostrado ser excelentes padres para sus tres hijos, y a ambos les encanta el proceso. Disfrutan de las actividades y de todo lo que conlleva la crianza.

Mientras tanto, Enrique reveló previamente que espera que sus hijos sigan los pasos de su madre, una ex tenista del top 10, en lugar de optar por una carrera musical como él”.

El cantante de Hero dijo en 2020: “Puedo decirles honestamente que, si tuviera que elegir uno, definitivamente los deportes. Sí, diría que sí, simplemente porque me encantan los deportes. Me encanta el golf, me encanta el tenis y no me importaría ver a una de mis hijas jugar al tenis. No quiero convertirme en uno de esos padres obsesivos, pero le dije a Anna: ‘Puedes ser la mejor entrenadora del mundo'”.

La estrella española explicó una vez que espera ser un padre “genial”, pero sintió que había desarrollado un nuevo sentido de responsabilidad desde que se convirtió en padre.

Enrique dijo: “Es una de las mejores sensaciones del mundo. Soy más responsable. Conduzco más despacio. Pienso en las estupideces un par de veces más antes de hacerlas. Espero ser un padre tranquilo y amable”.